Aprovechando la gran variedad de plantas aromáticas que tenemos en el huerto (incienso, romero, orégano, lavanda, hierbabuena, apio…), los alumnos del primer internivel de Educación Primartia han hecho un pequeño taller.
Primero han jugado a engañar a su cerebro, haciéndole creer que estaban comiendo chocolate y así ha mandado orden a la boca para salivar.
Luego han olido varias plantas aromáticas.
Lo han hecho de una en una y se han fijado en los diferentes matices de cada planta.
Para terminar, han jugado por equipos a identificar con los ojos cerrados ,alguna de estas plantas.
Parece muy fácil, pero en realidad, no lo es tanto. Nuestra nariz, no es capaz de distinguir muchos olores seguidos, se mezclan pequeños toques de unos olores con otros.
Han aprendido cosas nuevas sobre el cerebro, el olfato… y se han divertido.
Luego han olido varias plantas aromáticas.
Lo han hecho de una en una y se han fijado en los diferentes matices de cada planta.
Para terminar, han jugado por equipos a identificar con los ojos cerrados ,alguna de estas plantas.
Parece muy fácil, pero en realidad, no lo es tanto. Nuestra nariz, no es capaz de distinguir muchos olores seguidos, se mezclan pequeños toques de unos olores con otros.
Han aprendido cosas nuevas sobre el cerebro, el olfato… y se han divertido.
